A principios de Octubre me lo dieron casi vacío y enseguida comprendí lo importante que sería rellenarlo. Iban pasando los meses, y la vida académica y yo íbamos por sitios diferentes. Empecé timidamente con los exámenes y me saqué aquellos a los que me presenté, pero aún así eran pocos. Sentía frustación y arrepentimiento por no haberlo hecho todo antes. Por dejar todo al final, pero también tiene sus cosas positivas, pensaba. Y así ha sido, un año de evasión en el que lo poco que he estudiado lo recordaré mucho tiempo. Hoy, he terminado mi año académico en Italia, y esta noche, a celebrarlo con las personas que han hecho posible esto con su apoyo. Aunque me faltan algunas.
"Que viva el erasmus. "
"Que viva el erasmus. "
No hay comentarios:
Publicar un comentario