sábado, 16 de julio de 2011

Ballet.



Hace muchos años, al salir de una clase de ballet, de aquéllas a las que iba desde que tenía cuatro añitos, recibí este regalo que inmediatamente colgué en mi habitación, y aún hoy me trae buenos recuerdos cuando la miro.

"Cada día en el que no hayamos danzado al menos una vez, es un día perdido.   "

No hay comentarios:

Publicar un comentario