Muchas veces nos pasamos los días pensando en lo bonito que podría ser todo y que por supuesto ahora no lo es. Pensamos en lo que nos costaría animarnos si nos pasase ésto o lo de más allá. Creemos que con esa clase de pensamientos nos preparamos para las cosas malas que pasan. Pero yo no creo que sea así. Para lo único que sirve es para no ver que las cosas ahora sí son bonitas. O sino, mirar este paisaje y decirme lo contrario.
" La montaña oscurece y asume la púrpura magnificencia de las hojas de otoño. "
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