Tarde de paseo con las niñas del erasmus, de hablar sobre los estreses de los apellos, de lo diferente que puede ser una situación aquí o en España, de los chocolates, los bombones, los crepes y las tartas que están muy buenas pero al final no tanto, o por lo menos, que deberían y no están "caldas". Ha merecido la pena estudiar toda la mañana para dejar la tarde libre y poder salir a dar una vueltecitilla, que no todo va a ser estudiar.
PD: ¡Qué buenos estaban los bombones cuadrados enormes! Voglio più!
" Y una cosa estaba totalmente clara, la vida, jamás había sido tan dulce."
No hay comentarios:
Publicar un comentario